El escultor, dibujante, grabador, golero de fútbol, Chillida comienza sus estudios de arquitectura en San Sebastián continuándolos en la Universidad de Madrid hasta 1947 cuando decide estudiar dibujo en el Círculo de Bellas Artes de Madrid. Viaja a París en 1948, ciudad que revisita a lo largo de su vida, donde comienza sus primeras piezas en yeso, de claras influencias clásicas. Casado con Pilar Belzune (1950), con quien tendrá ocho hijos, se radicará en en Euskadi haciendo de su vivienda y terrenos un espacio emblemático del país vasco. En 1951 cuando madura su lenguaje abstracto de referencias expresivas y telúricas, de gran fuerza y brutalismo. También en 1951 realiza su primera obra en hierro, material que trabaja como los artesanos de la forja y la fragua de tradición vasca al tiempo que experimenta en creaciones en distintos materiales como madera, piedra, hormigón, acero. Crece su interés en grandes formatos junto a arquitectos en producciones insertas en paisajes. La obra gráfica de Chillida, que inicia hacia 1959, unos diez años después de su conocida obra escultórica. En ella vuelve sobre sus interrogantes permanentes en torno al espacio, las formas austeras que se desplazan con liviandad mediante la reflexión depurada que caracteriza toda su legado artístico. Realizó numerosos dibujos, aguatintas, xilografías, litografías, aguafuertes como las tres presentes en el acervo del MNAV. La totalidad de su producción gráfica se conforma por blancos y negros, cuya fundamentación la explica en propio Chillida: "Probablemente con el negro y el blanco, se produce, a mi juicio, la dialéctica más poderosa y elemental. Hablo de elemental en el sentido de que todo lo decisivo se puede decir sólo con estos dos colores o valores extremos" Eduardo Chillida "La poética del papel". Centro Cultural de España, Montevideo, 2009, Pág. 35.(En) Ugarte, Luxio, "Chillida: dudas y preguntas", Erein, San Sebastián, 1991, Pág. 63.Chillida obtuvo numerosos premios y distinciones, entre los que se destacan:Gran Premio de la 29 Bienal de Venecia, 1958; Premio Kandinsky, 1960; Premio Carnegie de Escultura en Pittsburg (1964); Premio Europa de Bellas Artes en Estrasburgo, 1983; Gran Premio de las Artes en Francia, 1984; Premio Príncipe de Asturias, 1987; Premio Jack Goldhil de Escultura, Royal Academy de Londres, 1996; Medalla de Oro de Guipúzcoa, 1998.