Pintor francés. Tras formarse durante dos años con pintores paisajistas como Michallon y Bertin, comenzó su trayectoria pintando al aire libre, fuertemente influenciado por el estilo italiano. Sus primeras obras, como El puente de Narni se caracterizan por una pálida luminosidad y una sutil expresividad poética. Presencia habitual en los Salones de Otoño, a principios de 1830 se decantó por una temática más modesta, aunque sin apartarse del paisajismo o el retrato (Jinete del caballo blanco, 1833). Regresó a Italia en 1843, momento a partir del cual fue matizando su paleta para captar con suave lirismo la textura luminosa de amaneceres y crepúsculos, en una especie de romanticismo calmo y reposado cuya técnica de pincelada corta anuncia el impresionismo (La danza de las ninfas, 1850). En esta última etapa, la pintura de Corot alcanzó un supremo equilibrio entre idealismo y realismo, que se tradujo en obras maestras tales como Mujer de la perla (1868-1870) o Mujer en azul (1874).